Qué es ser Activista Consciente?

Cuando comencé a ser activista ni siquiera me había dado cuenta. Esto quiere decir que no supone todo un despliegue de bombos y platillos, ir a manifestaciones con carteles o casa por casa pidiendo firmas; que también está bien pero no son las únicas maneras de ser activista. Hoy gracias a la tecnología y las redes sociales hay muchas otras maneras de ser parte del cambio.

Un activista es una persona que “se activa”, se pone en movimiento para mejorar o cambiar una determinada necesidad personal y/o social que puede afectar tanto a  personas, animales como al planeta.

Quizás la palabra activista aleja a las personas porque que creen que dedicarse a ello conlleva mucho tiempo y no disponen de él, que no tienen conocimientos acerca de cómo ser activista o incluso requiere hasta arriesgar la vida por una causa.

Y como mencionaba antes, hay distintos tipos de activismo y uno puede acoplarse y participar al que mejor le resuene o como me sucedió  a mí, encontrarse participando sin saberlo. Ya que lo más importante para ser activista, es apartar las excusas y pasar a la acción.

En mi propio caso; cuando fui consciente de la alimentación artificial que estaba llevando, decidí cambiarla, mejorarla y adaptarla a un estilo saludable y sostenible. inicié eliminando productos procedentes de animales (carnes, lácteos, etc.), de producción intensiva. También verduras cultivadas con agroquímicos (fertilizantes, herbicidas, etc.); por lo que comencé a comprar alimentos libres de todo eso, los cuales no suelen encontrarse en las grandes cadenas de supermercados. Eso me llevo a conocer a productores de mi zona y a la problemática que estaba atravesando el sector.

 

Activismo Consciente“Con el simple cambio del lugar dónde hacía mis compras, no solamente me estaba beneficiando en lo que a salud y bienestar se refiere, sino también a esos productores, a la preservación de las especies autóctonas y a su vez a la economía local”.

Al comprar las materias primas a personas en vez de empresas multinacionales o monopolios, también dejé de financiar la explotación de niños, mujeres y demás personas vulnerables, de animales y del saqueo de los recursos naturales del planeta.

Como verás una de las formas de activismo más sencillas e importantes si se quiere, es el “activismo consciente”; practicar aquello en lo que crees, aplicándolo en tu vida cotidiana y comportándote de manera que respalde la causa de forma directa, como por ejemplo: si quieres dejar de financiar a las farmacéuticas en vez de consumir un ibuprofeno para el dolor o un antiácido para la indigestión consumirás plantas medicinales, que además de contribuir con tu propósito, no te causarán efectos secundarios. Si quieres deshacerte de tóxicos en tu alimentación, cocina tu comida con aliementos en vez de “productos comestibles”.

O simplemente puedes promover y seguir ciertos comportamientos que contribuyan a la causa, tal como boicotear determinados productos de consumo, o cambiar los lugares de compra y que esta sea al por mayor junto a otras personas a fin de evitar plásticos y otros residuos, además de ahorrar dinero. Puedes crear o firmar peticiones y compartirlo en las redes sociales con el fin de que más personas se sumen; dedicar algunas horas a la semana o al mes a activiades de voluntariado en distintas ONG’S o asociaciones o incluso contribuir con dinero a una causa de tu interés.

Este escrito, aunque fuerte pero real representa la importancia de “ser parte de los cambios”:

 

“Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio, ya que no era comunista

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas
guardé silencio, ya que no era socialdemócrata

Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas, no protesté,
ya que no era sindicalista

Cuando vinieron a llevarse a los judíos, no protesté,
ya que no era judío

Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.”

Martín Niemöller

 

Pasar a la acción cambia y marca vidas, la tuya y la de cientos de miles más. Un pequeño gesto, sumado al de otros como tú, son los que cambian las realidades más duras y hasta aquellas invisibles.

Te animo a que seas parte del cambio. Tus elecciones y decisiones cotidianas afectan profundamente a todos los niveles de la supervivencia de la misma humanidad.

Cada día, a cada minuto tienes la oportunidad de ejercer tu poder, ese momento es el de la elección de lo que compras y donde lo haces.

Activizate!, sal de la Mátrix y comienza a mejorar todo aquello que consideres que no está en armonía con el respeto, la igualdad y el bienestar de todos los seres vivos!

 

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